viernes, 2 de marzo de 2012

CANALIZACIÓN [13-07-2011]




Lugar: Trevejos (Vilaflor, Tenerife)
Emisor: Juan Bethencourt García [mi bisabuelo]


Ese día fui a quedarme yo sola al cuarto que heredó mi madre en la casa de su abuelo. Hacía días que andaba inquieta, sintiendo que debía ir a quedarme yo sola. Desde que canalizo con la escritura siente una tensión en mi brazo derecho que me hace comprender que debo comunicarme. Sabía que tendría que escribir, y me dispuse a ello. 

Directamente comienzo a canalizar con estas palabras incomprensibles para mí.



Ellos:

Imicanan:
Ajben sali impular
wina mar mi
Entir wina 
mitalar entina 
Eminar intina 
micalar intina. 


Entra en la cueva y pide hablar conmigo, te estoy esperando.

Yo: 
¿Quién eres?

Ellos: 
Soy ese que te espera siempre. Entra en la cueva, allí tienes a Winamar. Estoy aquí.

Yo: 
¿Quién eres?

Ellos: 
Juan Bethencourt García.

Yo: 
¿Qué quieren?

Ellos: 
Hablar de Wina.

Yo:
 ¿Vienes en nombre de Dios?

Ellos: 
En nombre de Dios y de Winamar. Él es el Dios de Wina. Él tiene mucho que decirte.
Yo: 
¿Quieres que te pregunte?

Ellos:
No, yo hablaré.
Wina era un lugar de paz y tranquilidad. Era un lugar armonioso y con mucha fertilidad en todos los sentidos. Era un lugar rico de virtudes y esperanzas como pueblo hasta que llegó el Alfére[z] Fernando de Lugo [Alonso Fernández de Lugo y de las Casas].
En la sociedad de Wina existía una harimaguada que era aceptada casi como diosa.

Yo: 
Gracias.